[B]2. ESCOGIENDO MONITOR CRT (¿Qué valorar en un monitor CRT?)[/B]
2.1 Tamaño
Lo primero a tener en cuenta es la resolución con la que vamos a trabajar normalmente, que más se ajuste a nuestro uso normal, determinado por el tipo de aplicaciones: ofimática, juegos, diseño gráfico, CAD, infografía, edición de vídeo, etc. Mi recomendación, es la de descartar cualquier CRT que esté por debajo de las 17", dados los precios que podemos encontrar hoy en día. Hay que contar que en principio cada tamaño tiene unas resoluciones adecuadas, en las que se consigue un funcionamiento óptimo, que también dependerá de la calidad del monitor:
TAMAÑO RESOLUCIONES
15" --------------------------- 800 x 600
17" --------------------------- entre 1024 x 768 y 1182 x 864
19" --------------------------- entre 1182 x 864 y 1280 x 1024
22" --------------------------- entre 1280 x 1024 y 1600 x 1200
Para ofimática, juegos, navegación web, multimedia, diseño de páginas web, etc., es suficiente un 17", aunque si nos podemos permitir el lujo, un 19" es una buena opción. Para aplicaciones profesionales relacionadas con la edición fotográfica, video, CAD, infografía, no recomendaría nada que esté por debajo de 19".
Encontraremos modelos de monitor que nos den resoluciones muy superiores a la óptima para su tamaño. He llegado a ver casos en los que un fabricante ofrece dos modelos de 17", uno que alcanza hasta una resolución máxima de 1280x1024 y el otro de 1600x1200. Ambos con características prácticamente idénticas, pero el modelo que alcanza la resolución mayor, sensiblemente más caro. Una resolución de 1600x1200 no es práctica para un monitor de 17", pues a dicha resolución los textos serán poco legibles, los iconos del escritorio ser verán diminutos y la calidad de imagen estará lejos de la máxima que podemos obtener con el mismo monitor a su resolución óptima. Por tanto es importante recalcar que debemos buscar el equilibrio en este aspecto y no buscar prestaciones extras que a la hora de la verdad no vamos a poder aprovechar y que en cambio, se traducen en un precio más elevado.
Sabiendo ya el tamaño y resolución que más se ajusta a nuestras necesidades, podemos entrar a valorar el resto de características, que siempre están en función de la resolución:
2.2 Refresco de pantalla
Ya he explicado en que consiste el refresco de pantalla en el apartado "TECNOLOGÍA CRT" y de la importancia que tiene de cara a la salud visual del usuario. De hecho es el parámetro que debemos atender de manera más esencial, pues aunque no está relacionado directamente con la calidad de imagen, sí es el que influye de forma directa en la comodidad y salud visual.
A mayor resolución la frecuencia de refresco tenderá a ser más baja. Si por ejemplo un monitor alcanza como máximo los 100 Hz a una resolución de 1024x768, lo más probable es que no supere los 85 Hz a una resolución superior de 1280x1024. Esto tiene su lógica, pues la frecuencia de refresco consiste en el número de veces que se redibuja la pantalla, y por tanto a mayor resolución el área a redibujar será mayor (un número de píxeles más alto), y menor número de veces por segundo se podrá redibujar. El refresco de pantalla que sea capaz de dar un monitor, dependerá del ancho de banda del propio monitor, pero también de la tarjeta gráfica. Hoy día podemos dar por sentado, que cualquier tarjeta gráfica, por básica que sea, puede dar el refresco que requiera el monitor y mucho más, a menos que sea una "antigualla".
La frecuencia óptima de refresco es de 85 Hz en adelante. Con 85 Hz podemos estar delante de un monitor durante horas sin gran perjuicio para la vista. Con 100 Hz se alcanza la estabilidad máxima.
A partir de este dato, y teniendo claro que resolución se va ajustar más a nuestras necesidades, podremos afinar más en la elección. Por ejemplo si vamos a trabajar normalmente a una resolución de 1280x1024, tendremos que buscar un monitor que consiga al menos 85Hz a dicha resolución.
Existe otro parámetro que también está relacionado con el refresco, que es el refresco horizontal, el cual se mide en Kilohercios (Khz.) . Pero este parámetro está ligado al refresco vertical del cual hemos estado hablando, medido en hercios (Hz). Por tanto bastará fijarnos en los Hz del refresco vertical para tener una idea clara del refresco de pantalla que puede dar cada monitor, y de hecho es este parámetro el que siempre se usa como referencia. En las hojas de especificaciones técnicas de cada modelo, suelen presentar las distintas resoluciones a las que puede funcionar el monitor con los correspondientes refrescos en hercios.
2.3 Distancia entre píxeles (dot pitch)
No hay que confundir este parámetro con el tamaño de píxel, pues el píxel, en la tecnología CRT, no tiene un tamaño fijo, sino que varía según la resolución a la que ajustemos el monitor. En el mismo monitor, a una resolución de 1024x768 tendremos un número de píxeles bastante mayor que por ejemplo a una resolución de 800x600. Esto significa que cada píxel será más pequeño en el primer caso que en el segundo, pues en el mismo tamaño de pantalla se representa un número mayor de píxeles.
Este parámetro lo que indica, es la distancia que separa a cada píxel de los píxeles adyacentes. Cuanto menor sea esta distancia, mayor nitidez tendrá la imagen. También hay que tener en cuenta, que esta distancia tiende a ser más pequeña en el centro de la pantalla, pero a medida que nos acercamos a las esquinas tiende a incrementarse ligeramente, de ahí que algunos fabricantes, den dos medidas, una máxima y otra mínima . En lo que debemos fijarnos es que el monitor no supere un dot pitch de 0,28 mm. Tampoco debemos dejarnos deslumbrar por algunos fabricantes que presentan algunos modelos con dot pitch sorprendentemente bajos, como por ejemplo 0,22 mm. Esto es debido que hay diversas tecnologías CRT, en algunas de las cuales no se miden exactamente la distancia entre píxeles, pues no es aplicable debido a su naturaleza, pero si dan un tipo de medida equivalente al dot pitch. En cualquier caso, normalmente un 0,22 mm en cierta tecnología suele ser equivalente a 0,25 mm en otra. Tampoco debemos obsesionarnos por esta cuestión, así que bastará con optar por un monitor que no supere los 0,28 mm, considerando un valor excelente 0,26mm o cualquier cifra inferior .
2.4 Pantalla plana vs. cóncava. Geometría
Notaremos que tanto los monitores como los televisores tradicionales, tienen la pantalla curvada hacia fuera (cóncava). Para incrementar la calidad de imagen y reducir la incidencia de reflejos, se empezaron a diseñar sistemas que permitían eliminar esa concavidad, consiguiendo una pantalla de aspecto plano. No me voy a meter en aspectos técnicos de tecnologías de tubo y rejilla que se emplean para conseguir esto. Uno de los fabricantes pioneros en esto, fue Sony con su sistema Trinitron, que a parte de conseguir mejor contraste y nitidez y un dot pitch más bajo (0,25 mm), permitía una pantalla de aspecto plano. Sony ha ido licenciando esta tecnología a otros fabricantes, pero al ser una tecnología propietaria, implica el pago de royalties por su uso, lo cual hace que solo unos pocos fabricantes presenten monitores con sistema Trinitron. Como alternativa, otros fabricantes han ido diseñando sistemas, como FlatTron, Diamatron, etc. Mi recomendación es optar por una pantalla de aspecto plano, pues suelen tener mejor geometría, contraste y nitidez, a parte de las ventajas de una menor incidencia de los molestos reflejos. Prácticamente todos los monitores de gama media y alta utilizan uno u otro sistema de pantalla de aspecto plano. Al principio el sistema Trinitron, que también ha ido evolucionando a lo largo de los años, no tenía competencia, pero otros sistemas alternativos han ido alcanzando un alto nivel, y representan una buena alternativa al Trinitron.
Sobre la calidad de geometría de un monitor hay un programita llamado "Test de Nokia", que nos permite apreciar las prestaciones.
2.5 Lo que damos por sentado
Hoy día todos los monitores cumplen todas las normativas de baja radiación (las MPRII suecas se convirtieron en punto de referencia), emisiones electromagnéticas y ahorro de energía. En otra época un monitor de baja radiación era un extra, y hoy día no se fabrican monitores que no sean de baja radiación, teniendo que ser muy antiguo para que no cumpla esta regla. Lo mismo ocurre con otros aspectos como ahorro de energía, que permite que el monitor pueda entrar en estado de suspensión tras un tiempo sin usar el teclado y el ratón. Este tiempo se ajusta desde el sistema operativo, y permite que el monitor esté casi apagado consumiendo un mínimo de energía y emitiendo poco calor, con un nulo desgaste del tubo.
Otro aspecto es el de entrelazado / no entrelazado: en monitores antiguos se conseguía la posibilidad de conseguir mayores resoluciones mediante una técnica de entrelazado, que consiste en que la tarjeta gráfica dibujaba en una pasada las líneas de píxeles pares y en la siguiente las impares. Esta técnica suponía una pérdida de calidad de imagen muy alta, y un parpadeo excesivo de pantalla. En las especificaciones del monitor iban anotadas qué resoluciones iban en modo entrelazado y cuales en modo no entrelazado. Hoy día este parámetro no tiene sentido, pues no se fabrican monitores que utilicen esta técnica.
Controles digitales / analógicos : en monitores más antiguos los ajustes de brillo contraste, tamaño, posición de pantalla y resto de parámetros se podían ajustar manualmente de forma analógica mediante una serie de ruedecillas a modo de potenciómetros. Posteriormente se fueron introduciendo controles digitales mediante botones para los parámetros más complejos y delicados de ajustar y se dejaban con el sistema tradicional de "ruedecilla analógica" los más básicos, como el brillo y contraste. Hoy día todos los ajustes se modifican digitalmente mediante menús superpuestos en la propia pantalla, y también se dejan que los más básicos tengan también la opción de ajustarse mediante botones en el frontal de la carcasa del monitor, a modo de atajo.
2.6 Precio
Si hay algo en lo que no se debe ahorrar a la hora de comprar un ordenador, es en el monitor, principalmente de cara a nuestra salud visual, pero también de cara a la calidad de imagen. Hoy día, dentro del mundo de los ordenadores personales, ya sean PC, Macintosh u otra plataforma, las aplicaciones que más potencian requieren están muy relacionadas con la imagen. Por ejemplo, ¿de que nos sirve pagar un elevadísimo precio por un equipo que supera los 2GHz con una aceleradora 3D que sobrepasa los 300€ y que nos permite jugar a juegos 3D a altísimas resoluciones sin perder rendimiento, si nuestro monitor no va a poder estar a la altura y aprovechar esa altísima calidad?. Mi consejo es que le demos prioridad al monitor, sobre todo pensando en que un buen monitor nos puede durar varios equipos y es una inversión de cara a la salud y a la comodidad de uso del ordenador. Solo en algún caso muy concreto como el de un servidor de red en el que se usa muy esporádicamente el monitor, vale la pena ahorrar.
Siguiendo en esta línea, nos podemos encontrar algún "chollo" en forma de monitor de por ejemplo 17" baratísimo. Lo que nos podemos encontrar es que dicho monitor tenga características muy recortadas, como por ejemplo que no supere los 70 Hz de refresco a una resolución de 1024x768, que tenga mala convergencia, geometría, etc. No descarto que pueda existir un "chollo", pero siempre hay que desconfiar a priori.